Entrevista a João Pedro Costa, Coordinador del Núcleo de Urbanismo del Centro de investigación en Arquitectura, Urbanismo y Diseño (CIAUD), Arquitecto de formación, Doctor en urbanismo en la UPC, Profesor en la Universidad de Lisboa, facultad de Arquitectura, y también activo en la política portuguesa (actualmente es candidato a Vice-alcalde de Lisboa) y en la realización de trabajos de consultoría internacional.

Por: Laura Moreno Segura. @IdenCity_World

1. Su trabajo se ha centrado de manera importante en la recuperación de fuentes hídricas y renovación urbana. ¿Nos daría un breve resumen de su experiencia?

Llevo más de 15 años trabajando en temas relacionados con los ríos. Todo empezó con mi doctorado sobre la renovación urbana de antiguos terrenos portuarios e industriales. Luego, trabajé en el documento estratégico para la candidatura de Lisboa como ciudad organizadora de la Exposición de 1998. En la mitad de la última década hubo un hecho que cambió mi aproximación a estas cuestiones: la aparición de la agenda de adaptación al cambio climático que se vincula al tema de las fuentes de agua, en parte debido al efecto del huracán Katrina en Nueva Orleans. Ese es el objeto de mi libro “Urbanismo e Adaptação às Alterações Climáticas, as frentes de agua”. Dentro de la consultoría internacional he trabajado en la recuperación de cuencas de ríos y, en particular, de ríos urbanos con altos índices de contaminación. Éstos necesitan intervenciones muy transversales que van desde la calidad del agua y el saneamiento básico al saneamiento industrial. El ejemplo más reciente ha sido en Puebla, México, donde he formado parte de una misión internacional, promovida por el ayuntamiento de Puebla, para trabajar esta temática, la recuperación del río Atoyac.

2. ¿Qué nos podría comentar sobre su percepción acerca de la evolución de la agenda de cambio climático en los últimos 20 años y específicamente su relación con la recuperación de fuentes hídricas?

A mi parecer, el mensaje principal de la agenda de adaptación al cambio climático es un mensaje de humildad, ya que la perspectiva que se adopta, relativamente consensual, es que el hombre no es capaz de dominar a la naturaleza. Esta perspectiva inteligente, o descrita de otra manera, como sostenible o resiliente, expresa la idea de convivencia entre el hombre y la naturaleza. La agenda de adaptación presupone un trabajo conjunto con la naturaleza y marca un cambio de filosofía, de proyecto y de planteamiento durante este siglo, en comparación con el hombre del siglo XX, que creía que con su técnica podría dominar la naturaleza.

3. Pero es un cambio de perspectiva que se da a diferentes velocidades y que aún se enfrenta a muchos obstáculos.

Primero, debo decir que la lectura científica es consensuada y lo es en todo el mundo: hay un cambio climático por efecto del hombre y éste es más acelerado si el hombre no toma medidas en relación a la emisión de gases con efecto invernadero. La única duda que hay es sobre la velocidad de este cambio, entre estudios más o menos conservadores.

En segundo lugar, yo creo que tanto Europa como Estados Unidos son pioneros en la agenda de adaptación porque son comunidades preocupadas por su futuro y por los efectos del cambio climático. Desde este punto de vista, algunos casos en E.E.U.U. son de los más desarrollados en el mundo, aún teniendo en cuenta que la Administración de Obama no subscribió el Protocolo de Kyoto o que Donald Trump ha salido del Acuerdo de París. Vale la pena decir que la agenda de San Francisco o de Nueva York son agendas de adaptación de primera línea mundial.

En mi opinión, la diferencia de velocidades ocurre entre Europa y EEUU con América Latina y África, es decir, con el mundo no tan desarrollado. Ahí el tema principal es la dificultad para hablar de cambio climático en comunidades donde no hay agua en condiciones para beber, no hay saneamiento, tienen los ríos contaminados y pobreza. Empezando por la primera generación de política ambiental, compuesta por los servicios básicos de agua y saneamiento, tienen varias generaciones de política ambiental por implementar y las tienen que hacer todas simultáneamente, pero las primeras son naturalmente muy urgentes…

4. A partir de su experiencia ¿considera que se puede llevar a cabo esta agenda de diferentes niveles simultáneamente?

El caso de Timor ha sido muy interesante. Es un trabajo que hemos desarrollado entre el 2015 y el 2016 y que terminó con la aprobación del primer plan de ordenación del territorio de este país, concretamente de la Isla de Ataúro. En esta isla hay intenciones de inversión para proyectos turísticos de gran calidad y de lujo, pero también hay pueblos sobre el mar que no tienen acceso telefónico, que para beber agua tienen que caminar una hora por la montaña, que cuando hace mal tiempo o alguien tiene un problema de salud no tiene como salir y puede morir de una enfermedad básica… Por lo tanto, hay una agenda básica por desarrollar al mismo tiempo que demandas de inversiones turísticas de nivel superior del mundo contemporáneo. Aquí, el desafío es cómo combinar agendas tan heterogéneas, tan diferentes y, obviamente, con respeto por las personas que están ahí, porque estas comunidades merecen tener infraestructuras, agua, educación… Estas oportunidades de inversión podrían ser la forma de financiar toda la infraestructura necesaria.

5. Esta es una manera muy interesante de plantear el problema porque vemos cómo efectivamente dos modelos están de alguna manera conviviendo pero sin llegar a compaginarse completamente. En el caso de Timor, ¿cuál fue la respuesta dada por el plan de ordenamiento a estos desafíos ambientales y de desarrollo?

Do it your own way”, que quiere decir que lo peor es intentar importar modelos de fuera. Primero, hay que identificar el objetivo, que en este caso es dotar de infraestructuras y de servicios, y después, buscar formas imaginativas locales, invitando a la comunidad para hacerlo bien, garantizando que el día que el apoyo internacional desaparezca, las cosas sigan funcionando. Porque lo que pasa en Timor, y en muchos otros países, es que hay agencias internacionales que crean infraestructuras y las mantienen y el día que se van, dejan de funcionar.

6. Pasando a otro tema, como bien sabrás, existe una preocupación relacionada con que la recuperación de los ríos da lugar a especulación inmobiliaria. ¿Cómo evitar que esto ocurra?

El sector inmobiliario se constituye en un instrumento muy potente en cualquier estrategia de regeneración urbana. Es deseable, saludable, positivo y absolutamente necesario. El desafío consiste en asegurar que se cumplen los objetivos generales de la renovación, los objetivos ambientales y utilizar positivamente el desarrollo inmobiliario como factor de dinamización de la renovación en sí misma y como agente de equilibrio financiero de la operación global, sabiendo que estas operaciones tardan entre 20 y 30 años, así como que hay ciclos financieros de boom inmobiliario y otros de crisis. Lo que obviamente no es deseable es una renovación especulativa salvaje.

7. Entonces, ¿cómo evitar que el interés privado sea el que determine las intervenciones?

Si estuviéramos hablando de Europa, te diría que la respuesta es el planeamiento público, con consenso y equilibrio. No obstante, las experiencias que voy teniendo me han enseñado que no hay un modelo que podamos transponer de una geografía a otra. Por tanto, esta lógica europea socialdemócrata de armonía público-privada, donde el interés público es cumplido al tiempo que se generan operaciones con ánimo de lucro, no se puede trasladar directamente a otros lugares porque implica, por ejemplo, el escrutinio del sector público por la propia administración pública, ya que de otra forma se puede dar lugar a la especulación o la corrupción. Es por esta razón que el modelo de un país desarrollado no se puede traspasar a otro.

8. ¿Podríamos pensar que la articulación inter-municipal garantizaría una estabilidad y un cierto equilibrio entre lo público y lo privado en el desarrollo de proyectos de recuperación de fuentes hídricas?

La idea central aquí es que los ríos son una temática local, regional, nacional e incluso internacional. El agua es el petróleo del siglo XXI. Cada ayuntamiento tiene el conocimiento de proximidad de dónde está la industria que más contamina, dónde está el barrio que no trata las aguas residuales… Y esta lógica de proximidad se utiliza incluso con el tema de desarrollo urbano, que es a nivel municipal, y también con la renovación urbana. La cuestión clave es cómo incentivar a un municipio o, lo que es más importante, lograr la coordinación entre municipios y, entre éstos y la perspectiva regional de la cuenca hidrográfica. El trabajo debería ser a escala inter-municipal (los municipios de la cuenca), movilizando así a los diferentes agentes locales para alcanzar un objetivo común. El secreto para países que ahora se enfrentan con estas problemáticas está en la capacidad de generar una dinámica integradora, involucrando en red a los agentes municipales (en la forma localmente adecuada de construir la inter-municipalidad) los agentes de la cuenca (normalmente regionales o nacionales) y los agentes financiadores (nacionales e internacionales).

9. Pero la experiencia muestra que es muy difícil conseguir tal articulación, pues cada uno de los alcaldes locales quiere atribuirse los méritos de los resultados de una determinada estrategia.

Cuando algún alcalde quiere ser el protagonista de todo, el camino va mal. Esta situación se da a menudo con el alcalde de la ciudad central, la que da el nombre al área metropolitana. Si alguien se cree el líder, los otros van a reaccionar en contra. Aquí lo importante es el proyecto de comunidad y hay que incluir a todos los sectores, los medios de comunicación, las agencias no gubernamentales de estas áreas, las escuelas, las empresas y los ciudadanos. Si el proyecto está en movimiento y va creciendo, los alcaldes van a querer estar presentes y trabajar en conjunto, y si el alcalde cambia, el proyecto, no obstante, debe continuar.

10. Además de este movimiento inter-municipal ¿cómo internacionalizar un problema local de recuperación de fuentes hídricas?

A partir del momento en el que se está expuesto a una red internacional, hay la obligación de actuar y de ser un buen ejemplo. Por lo tanto, el tema de la visibilidad internacional es un camino que sólo es adecuado cuando no es una imposición de fuera, sino que viene de la voluntad local de internacionalizar el problema y así ganar visibilidad, exposición pública y mediática, y con eso comprometerse.

11. ¿Los medios de comunicación son sensibles en este momento con la problemática climática?

Cada caso es diferente. En países de desarrollo intermedio, no hay el mismo nivel de presión mediática si la contaminación del agua y los ríos tiene repercusiones en el abastecimiento de agua o no. Si el abastecimiento no está asegurado para toda la población, la presión será mucho mayor.

12. Para terminar, ¿por qué apostar por la recuperación de las fuentes hídricas?

Son el petróleo del futuro, no tengo ninguna duda. Caminamos hacia un mundo donde podamos vivir con fuentes de energía alternativas y el petróleo pierda su valor; tarde o temprano, el petróleo será substituible, el agua no. En definitiva, todos vamos a seguir necesitando del agua, limpia, y la población mundial seguirá creciendo.